9 de Diciembre de 2010

"No puedo esperar ni a salir del edificio. Pienso en París y en bolsos y en muchos viajes a Cambridge. Primero abro la tarjeta del regalo. "Querida Nanny: ¡no sé lo que haríamos sin ti! Con cariño, los X." Rasgo el papel de regalo, abro la caja y me pongo a sacar puñados de papel de seda. No hay sobre. Oh, Dios mío, ¡no hay sobre! Pongo la caja boca abajo. Toneladas de papel vuelvan por el aire hasta que algo negro y peludo cae al suelo del ascensor con un golpe sordo. Me arrodillo, como un perro sobre un hueso. Retiro el desbarajuste que he provocado para descubrir mi tesoro y... y... y... son unas orejeras. Sencillamente orejeras. Nada más que orejeras. ¡Orejeras! ¡OREJERAS!"

The Nanny Diaries

Día templado, buena temperatura ambiente. Cansancio general post-puente sumado a acostarme tarde por tener que comentar textos de Tradición Clásica. Por la tarde, quedada para terminar el trabajo de Historia de El nombre de la Rosa y caminata con Míriam hasta Santo Domingo. Mañana vuelta a casa ... ¡Maldita sea! Para dos puñeteros días de clase ¿por qué no dejar la semana entera de puente? :)

Y mañana será otro día ...

1 comentario:

Victoria dijo...

Pobre Nanny...
La última parte, sobre todo la última interrogación, perfecta, sencillamente perfecta :D